XXII
No banquete dos
ilustres sô se ouviam
gargalhadas e aplausos.
Nem bem um gerifalte abria
a boca e jà era abafado polas
"ovaçâos"
Era um primor escutar e ver
tanto folgòrio acompanhado
de suculentas viandas, e finos
manjares, tudo bem regado
com caros vinhos e esquisitos
licores. Mentras, là num rincâo
perdido da taberna, eu e mais
outros coma mim, ao calor do
Ribeiro brincalhâo, entoàvamos
um cantar moi baixinho para
nâo molestar a suas senhorias.
XXII
En el banquete de los
ilustres sólo se oían
carcajadas y aplausos.
No bien un gerifalte abría
la boca y ya era ahogado por las
ovaciones.
Era un primor escuchar y ver
tanto jolgorio acompañado
de suculentas viandas y finos
manjares, todo bien regado
con caros vinos y exquisitos
licores. Mientras, allá en un rincón
perdido de la taberna, yo y otros
más como yo, al calor del
Ribeiro peleón, entonábamos
una canción muy bajito para
no molestar a sus señorías.
XXVII
Houve tempos
em que sonhava dia e
noite com atingir a glòria
de ser um grande poeta.Algo
assim como ter o aplauso do
povo enfervorecido e a vençâo
das bem chamadas èlites cultas.
Que idiota eu era e como facia
"o parvo"
Agora que me conformo com
umhas tacinhas de bom Ribeiro,
ao lado dos amigos a cantar,sem
fazer moito ruido,pode ser que
siga fazendo o parvo,mas, polo
menos nâo sou aquele infeliz e
saboreo um vinho que jà os
"Deuses quiseram para Si".
XXVII
Hubo tiempos
en que soñaba día y
noche con alcanzar la gloria
de ser un gran poeta. Algo
así como tener el aplauso del
pueblo enfervorizado y el apoyo
de las bien llamadas élites cultas.
Qué idiota era yo y cómo hacía
el pardillo
Ahora que me conformo con
unas copitas de buen Ribeiro,
cantando al lado de los amigos, sin
hacer mucho ruido, puede ser que
siga haciendo el pardillo, pero por lo
menos no soy ese infeliz y
saboreo un vino que ya los
Dioses quisieran para sí.