Maneras de vivir

por Carlos Díaz



Maneras de vivir un Shakespeare con: Oriol Broggi


Oriol Broggi, actor y director, nació en Barcelona en 1971. Es licenciado en dramaturgia y dirección escénica por el Institut del Teatre. Es director desde el 2003 del Centro Dramático del Vallés y actualmente podemos ver su versión de El Rei Lear, de William Shakespeare, en la Biblioteca de Catalunya.

—Oriol, has hecho clásicos de Molière, Brecht, Pirandello… pero este es el primer shakespeare al que te enfrentas. ¿Qué te ha aportado El Rei Lear como director?

—La verdad es que me daba miedo acercarme a Shakespeare. Me ha aportado unos códigos para relacionarme con el espectador nuevos para mí. He aprendido mucho porque me gusta acercarme a los clásicos con las obras más difíciles.

—En los tiempos que corren ser trasgresor está muy bien visto y además trae más público a la sala. Aunque el autor lo permite ¿por qué no has hecho un montaje más destroyer?

—El autor lo permite todo. No he hecho una cosa más destroyer porque no me ha apetecido, no me sale hacerlo. Pero si me saliera lo haría. De todos modos he hecho mis pequeñas trasgresiones, aunque es verdad que no sale nadie desnudo ni hay felaciones. Creo que en los clásicos cuando haces imágenes demasiado explícitas se muere un poco el texto porque no resiste la comparación. A no ser que sea genial. Y yo todavía no me atrevo a hacer genialidades. Yo quiero que mi obra funcione. Yo sé que lo que hago ahora funciona, pero si hiciera otras cosas quizás no me funcionarían.

—¿Pero te gusta arriesgar?

—No lo pienso. Este es un proyecto pequeño, con mi dinero y hago lo que creo conveniente. Si esto lo haces en el Teatre Nacional sí que te planteas si hago esto estoy arriesgando. Además creo que cuando pones en tus objetivos «arriesgar», «triunfar», es cuando te puedes equivocar fácilmente. Yo más que arriesgar, apuesto por las ideas puntuales que me vienen y las llevo a cabo.

—La crítica dice que eres un director joven y pijo. Joven lo eres, pero lo de pijo ¿a qué se refieren?

—Salió un artículo hace dos años que decía que me habían dado cosas en el Nacional por ser pijo. Pero yo soy de los directores que se han regalado menos cosas en mi carrera. Lo que me molestó en ese momento, ahora ya no, es que se pudiera pensar que alguien es joven o pijo para hacer un Rey Lear o un Espriu. Además, si eres maduro ya no te atreves tanto. Yo pensé o lo hago ahora o ya no lo podré hacer dentro de veinte años.

—Llevas doce años haciendo teatro. Has trabajado en el Romea, para el Teatre Nacional de Catalunya… pero para quien no haya visto ningún trabajo tuyo ¿cómo definirías tu manera de dirigir?

—De estos doce años, diez he estado trabajando para mi compañía, con mi dinero y generando más proyectos y más dinero. No sé bien, bien, como es mi teatro. La gente me dice que es un poco de Peter Brook. En los últimos trabajos se notan influencias de Bergman y Kurosawa. Pero cuando trabajé en el Romea cogimos más ideas de comedia americana. He trabajado mucho para mi mismo. Soy muy autodidacta. Hago un teatro simple porque tenemos poco dinero y porque nos gusta esta simplicidad. Esto provoca llevar a cabo más ideas estéticas y dar más importancia al actor. Hacemos un teatro de repertorio que recuerda al primer Teatre Lliure.

—Para ti el teatro tiene que ser una fiesta. ¿Es por ello que en la media parte dais gratis una copa de vino?

—Es la idea de que vas al teatro y es algo festivo y social. Te sientes partícipe de tu ciudad. Tiene ese sabor mediterráneo. En EE.UU., pobres, no, pero nosotros sí. Nos pusimos en contacto con los Gramona y regalan vino al espectador.

—La obra dura dos horas cuarenta minutos. ¿Pensaste en acortarla de algún modo para comodidad del espectador?

—Si no hubiera cortado nada duraría cuatro horas, pero si no la cortas un poco la gente desconecta. Nosotros fuimos cortando con los actores y los productores. Estuvimos los tres meses de ensayo cortando y sacamos una cuarta parte de la obra.

El Rei Lear se incluye en el Festival de Barcelona Grec’08. Si tuvieras que regalar dos entradas para ver otro espectáculo del Grec ¿qué obra sería?

Troilus and Crecida, en el Teatre Lliure, aunque no pude ir a verlo.

—Has trabajado en diversas ocasiones como ayudante de dirección de Sergi Belbel ¿crees que se nota en tu trabajo a la hora de dirigir?

—Sí. Mucho. Es de las personas que más he aprendido de teatro. Sergi tiene unos métodos muy poco métodos, nada fijos, sin demasiadas teorías.

—¿Y cómo se nota en esta ocasión la colaboración especial en la dirección de Pau Miró?

—En principio Pau tenía que salir en esta obra como actor. Por circunstancias no pudo ser y le propuse que viniera un par de días a la semana a ver los ensayos y que me diera su opinión desde fuera. Ha hecho un trabajo muy amable y concreto a la hora de decir cosas con mucha libertad.

—En la Biblioteca de Catalunya caben 160 personas. Siempre están las localidades vendidas pero imagino que no sale rentable puesto que en el espectáculo trabajan 14 actores, 2 regidores y 1 técnico. Entonces ¿por qué escogisteis la Biblioteca de Catalunya para representar El Rei Lear?

—Porque somos una compañía que ganamos dinero en unas cosas para invertirlas en otras. En éste íbamos a perder los muebles. Aunque se llene cada día, perdemos dos mil euros por función.

—Esto es amar el teatro. Como quieras tanto a tu mujer como al teatro, tu mujer tiene que estar encantada.

—Sí. Además, mi mujer es la gerente y jefa de producción.

—¿Ser actor te hace dirigir de manera diferente?

—Sí. A veces pienso que los hago sufrir de una forma que si tuviera fresco mi trabajo como actor no lo haría. Es importante saber el funcionamiento de los actores para poder dirigirlos.

—¿Quién pasa más hambre: los actores o los directores?

—Todos. Los directores pueden escoger e inventarse proyectos si tienen mucho empuje y los actores pueden trabajar en más cosas porque tienen la cabeza menos ocupada. El trabajo de actor es más duro y constante porque una vez estrenado tienen que hacerlo cada día. No valen medias tintas. Así que los dos se mueren de hambre.

—En el 2002 creaste la compañía de teatro La Perla 29 con la directora Carlota Subirós ¿cuál es el sello de la productora?

—Cuando empezamos queríamos hacer teatro de calidad. No sé lo que quiere decir, pero lo dijimos. Un teatro que nos gustase a nosotros, que fuera una cosa festiva, que hubiera ilusión y que el espectador lo notase. Queríamos que los actores quisieran volver a trabajar con nosotros. Que aunque no les hubiéramos pagado mucho tuvieran la sensación que los habíamos tratado bien. Además eso lo percibe el espectador. Y yo quiero que el espectador vea que nuestros actores son felices trabajando con nosotros. Y creo que este sello lo vamos consiguiendo poco a poco.

—¿Cuáles son las perlas más preciadas de tu vida?

—Mi familia.

—Si Oriol Broggi fuera un teatro ¿qué teatro sería?

—El Lliure de Gràcia.

—¿Y si fueras un personaje, cuál serías?

—El Misántropo, de Molière.

Si quieres ver el clásico de Shakespeare El Rei Lear por una compañía con mucha imaginación pero respetando la obra, búscalos porque empiezan la gira. Búscalos y los encontrarás.


🔸 🔸 🔹


Carlos Díaz
Carlos Díaz. Fue finalista como mejor actor en el Premio Espectador de la Revista Teatre Bcn por el personaje de Sra. Lucia en la obra Una Noche de Ópera, de La Cubana y Premio Ondas por el programa «Tarde de Todos», en Onda Rambla. Ha trabajado en numerosas obras de teatro: Grupo de teatro La Cubana: Una Noche de Ópera (Dir. Jordi Milán); Las Tres Hermanas, de Anton Chejov (Dir. Jordi Oliver); Pigmalión, de Bernard Shaw (Dir. Nancy Tuñón); Romeo y Julieta, de William Shakespeare (Dir. Nancy Tuñón); cine: Va a ser que nadie es perfecto (Dir. Joaquín Oristrell); Agujeros (Dir. Jan Latussek); Impedimentos (Dir. Doménech Gibert); televisión: Serie El Show de Cándido, en La Sexta; serie Hospital Central, en Tele 5 y serie Lobos, en Antena 3 Televisión, entre otros títulos. Dirigiendo y presentando el programa «Contigo en la Tarde» fue líder de audiencia en la programación de SomosRadio.

WEB DEL AUTOR: http://carlosdiazactor.es/



📰 Artículo publicado en Revista Almiar, n.º 41, agosto-septiembre de 2008. Página reeditada en mayo de 2021.


Sugerencias

aleatorio

Enlace aleatorio

Picasso

Picasso íntimo (artículo)