Beatriz Ruiz Páez
Lo probará bará baremos
Como cuando fumábamos eles a escondidas en mi cuarto ahora es
como cuando,
por primera vez o por ahora, ya primera última nunca
en sinfín de prevalecer de estar, respirar, ser variablemente uno y
gente, 2 alrededor, hola.
Tengo que ir deprisa, desenredar, acelerarme el pelo con los dedos
llenos, revertirme, sonido atención. Ventila y hace calor
o somos que estamos el aire en movimiento despejado.
Y ahora qué. Na da de par ques.
Ponlojunto, na da de par ques. Tiene que seguir, es el tiempo...
Es. Hacen falta dos mecheros
para encender el gran-caballo. Toma, dices,
nimiedades. Pero ¿qué viene a cuento de hablando?
Yo me vas, ¿tú te voy? Nos vamos.
24
A veces busco la sombra de la masa física del sol
o me pregunto si Berta irá este verano a visitar las pirámides
con su sombrero de paja
y en los ojos el reflejo
de los ojos de su amor.
Una vez vi una manzana caer de un almendro
lanzarse hacia los adentros de otra manzana,
pero choca más la muerte siempre,
es inevitable para mí
querer descifrar la letra
de la canción sin letra
del silencio.
Así que escuchad,
cuando vayáis a la guerra
procurad ser lo más invisibles que podáis,
gritad desarmados bien fuerte ¡¡Que os jodan!!
Recuerdo
Cerré tantas veces los ojos tan fuerte que me dolía el dedo gordo del pie.
Vi signos a lo cerca en sus costuras fuera,
deshilachadas rápidamente por un golpe de mirada sexual.
Conclusión
Anda bastante jodido el tema de decir sin pronunciarme aquí o allí
por eso de aquello ahora sólo queda el no acordarme
o vomitar y removerlo con un palo
cuando ya es demasiado temprano
como para provocar la lluvia, 200 torrenciales
o la caída de sus 2 pechos hacia el fondo
de mi estómago hambriento.
Sólo sé que cuando sea famosa haré algunas llamadas
y seré tan famosa, tan famosa, tan famosa,
que para entonces ya habré muerto.
@ Contactar con la autora: sic_33335 [at] hotmail.com
• Ilustración en poemas: Fotografía por
Pedro M. Martínez ©