por Carlos Díaz

 

À

ngel LLàcer, aunque es muy conocido por su faceta televisiva en Operación Triunfo, en su currículo constan más de quince programas de televisión y más de veinte obras de teatro. Ha ganado tres Premios Butaca como mejor actor por El somni de Mozart, Mein Kampf y The Full Monty y nominado en los Premios Max por este último musical. Con traducción de Jordi Prat, actualmente dirige en el teatro Condal Els bojos del bisturí.

—Naciste en el barrio de Sarriá, fuiste al Liceo Francés y te licenciaste en el Institut del Teatre y en ESADE. Imagino que te digan pijo no te ofenderá puesto que hay personas que a los famosos los vanaglorian y los insultan con la misma facilidad. ¿Qué es lo más desagradable que has tenido que escuchar?

—Es verdad lo que dices pero me ha sorprendido porque nadie me ha llamado pijo nunca. Porque no lo soy. Donde más me han insultado es en Internet, en los portales de televisión, donde la gente comenta e insulta libremente. Pero no me duele.

—¿Si pudieras empezar de nuevo hay alguna línea de tu currículo que borrarías para poder tener más trabajo de actor?

—No, porque yo creo que tendré trabajo de actor en el futuro. Por desgracia, si no eres rico no puedes escoger lo que haces y más en este trabajo artístico que las rachas van y vienen, que hoy eres lo más y mañana no eres nada. Por eso cuando he ganado mucho dinero o no he ganado yo siempre he sido el mismo. Estoy contento, me siento útil y hago feliz a la gente.

—Aunque eres muy joven da la sensación que te podrías retirar, económicamente hablando, ya que llevas diez años en televisión sin parar. ¿Te lo has planteado en alguna ocasión?

—En realidad ése era mi objetivo, retirarme a los cuarenta y cinco. Pero veo que es inviable. Mi intención era ahorrar y luego dedicarme al teatro.

—Has comentado que no quieres enfocar tu carrera hacia la televisión, incluso no crees que estés en dicho medio dentro de diez años. Entonces ¿qué te gustaría estar haciendo dentro de diez años?

—Me gustaría ser actor y director. Lo que pasa es que aún no me he puesto en serio a hacer lo que yo quiero en la vida. 

—En la obra Ya van 30 interpretabas a Guille. A él la gente que le rodeaba estaba empeñada en cambiarle la vida. Da la  impresión que a ti nadie te ha dirigido la vida, menos aún en tu profesión, y que siempre has hecho lo que te ha dado la gana. ¿Es así?

—(Ríe) Ni yo mismo me he sabido guiar. He hecho lo que he podido. Si hiciera lo que me diera la gana no haría muchas cosas de las que hago, no porque renuncie a ellas. Aunque los adolescentes me encuentran por la calle y me dicen eres el puto amo, pienso que es porque les doy un sentimiento de libertad.

—¿Alguna vez te has callado por miedo a perder tu puesto de trabajo o que no se te volviera a contratar?

—Yo siempre he dicho lo que pienso, pero eso pasa factura, claro. Yo soy un gran desenmascarador. Suelo caer mal a la gente que está encorsetada porque se sienten amenazados. Quizás por eso muchas veces no me han vuelto a contratar y sé que a veces me han censurado.

Eso me ha ocurrido toda la vida, incluso cuando era joven. Cuando estaba en el Institut yo dejé un taller porque un profesor me maltrataba. Él me dijo que no lo dejara, me negué y me amenazó diciéndome que no trabajaría nunca en este país. Luego me pasó con otra personaFoto Entrevista Ángel Llacer y ahora me ha vuelto a pasar con otra. Pero para trabajar con un imbécil prefiero no trabajar.

Si es para comer todos podemos hacer muchas cosas. A mi no me importaría irme a trabajar al Fnac. Sería un poco extraño para el cliente pero para mí no. Dirían qué declive, pero yo no lo veo como un declive. ¿Por qué menospreciar a alguien por su profesión?

—Está claro que Els bojos del bisturí no ha sufrido la censura incluso se menciona al conseller de Salud de la Generalitat. Es un vodevil alocado que se estrenó hace más de cuarenta años en Londres. Si el público no ríe donde está previsto ¿te sientes culpable?

—Me siento mal, fracasado.

—¿Y la culpa es del actor?

—A veces sí, a veces no. A veces del actor y a veces culpa mía. Yo me doy cuenta ¡eh!

—Tomarte una coca-cola y un gelocatil antes de salir al escenario ¿es una manía o más vale prevenir?

—Siempre lo hago porque me da energía.

—Quizás por ese aire histriónico que mostrabas en OT  y que también aparece en la obra todo parece indicar que podrías ser hipocondríaco ¿es así?

—Total. ¿Cómo lo sabes? Nunca lo había dicho. Siempre estoy enfermo. 

—¿Hoy qué enfermedad tienes?

—Anemia. Cada día tengo algo diferente. Nunca estoy sano. Ayer fui a ver el piromusical de las fiestas de la Mercè  y ahí me sentí sano. Con los petardos me invadió una cosa de felicidad… A veces hay que hacer estas cosas. Vas y te permites disfrutarlo.

—En la obra el personal sanitario celebra el día de Sant Jordi como corresponde, con libros y rosas. ¿Te gusta que te regalen flores o prefieres un libro?

—Flores. El lilium blanco me gusta mucho. El libro es un regalo muy personal. Cuando cumplí treinta y tres ó treinta y cuatro años hice una fiesta y pedí a todos mis amigos que me regalaran el libro de su vida.

—Si alguna vez tomamos café te llevaré un lilium blanco.

—No, uno no. Tráeme un ramo.

—¿Y cuál es el libro de tu vida?

—Como autor Paul Auster es el que más me gusta. Pero Ensayo sobre la ceguera es el libro que más me ha sorprendido. Pero todo depende del momento.

—La comedia explica el periplo de un doctor que recibe la visita inesperada de una enfermera con la que tuvo una relación amorosa y un hijo fruto de ella. Ahora que todo vale en televisión ¿tienes miedo de que alguna de tus exparejas se aproveche de tu popularidad para espolvorear tus intimidades?

—Sólo tengo una expareja. Estuve desde los diecinueve hasta los treinta y cuatro años con la misma persona.

—¿Y ahora estás en pareja?

—Sí, ahora está haciendo la cena y gracias a Dios no tiene nada que ver con el mundo del espectáculo.

—Siendo tan popular debe ser difícil encontrar pareja e incluso saber cuando alguien se acerca a ti si es porque eres quien eres o porque realmente le apetece conocerte. Si pudieras elegir ¿aceptarías trabajar menos pero tener más vida privada?

—Ser popular para hacer el amor es estupendo, bueno no. Y… No, no aceptaría trabajar menos porque yo tengo la filosofía de que siempre estoy de vacaciones.

—¿Siempre haces el amor o…?

—Yo creo que sí. Si alguna vez lo hacemos ya lo verás. Lo notarás en seguida. Dirás: Ui ¡qué diferente! Siempre hago el amor, quizás sólo un par de veces he follado. Hacer el amor es una manera muy práctica de conocer a la gente.

—Ángel, en la vida en general, ¿en qué consideras que eres el mejor o de lo mejorcito?

—Besando soy superbueno. Y en lo profesional soy bueno dirigiendo actores.

—Aunque no lo parezca, dices ser muy calmado, callado, hogareño y que tienes dos caras: la cara A, que es la real, y la cara B, que es la que sale por televisión. ¿Qué es lo que más nos sorprendería de la cara A?

—Un día vino un amigo mío con su hermana de dieciséis años que estaba superemocionada porque me iba a conocer. Mi amigo le avisó que cuando entrase en casa iba a ver un koala mezcla perezoso que arrastra los pies por casa y hace uuuuu. La hermana no se lo creía y al cabo de diez minutos mis amigos se empezaron a descojonar porque fue exactamente lo que pasó.

—Que en la wikipedia ponga que lograste gran popularidad en Operación Triunfo por tu carácter histriónico y tus gritos a los concursantes ¿te gusta o te molesta?

—Ni me gusta ni me disgusta. Si yo saliera en televisión como soy día a día o como hablo normalmente, no me pagarían el dinero que me pagan porque no interesaría a nadie.

—Habiendo explotado tanto ese carácter ¿has temido alguna vez que se quemara el personaje o que el personaje anulara a la persona?

—No. Si se quema, que se queme. No pasa nada.

—¿Con qué concursante ha sido más injusta la profesión?

—Con muchos. Quizás a algunos les ha perjudicado participar en OT. Muchos son mejores que muchas estrellas del pop español. También hay concursantes de los que ni me acuerdo o los mezclo de edición.

—¿Hay alguno que te haya decepcionado?

—Imagino que yo también a alguno de ellos. La relación de amor que se crea es muy fuerte, pero cuando se acaba el programa se acaba el amor.

—¿De qué participante te has comprado su disco?

—El último uno de Elena Gadel, Tocant fusta, que es brutal.  

—Te propongo una situación y tú me dices con qué concursante harías tal situación:

—Copresentarías un programa con… «Soraya».

—Dirigirías en un musical a… «Ángel Capel».

—Irías a comer a un bar de comida rápida con… «No iría a un restaurante de comida rápida».

—Pasarías una tarde en un museo con… «Elena Gadel».

—Pasarías una noche en la playa a solas a la luz de la luna con (Se lo piensa un par de segundos)… «Con ningún concursante de OT».

—Un programa tan emblemático no se merecía un final tan triste ¿de quién crees que fue la culpa de que no remontara?

—(Silencio y ríe) No te puedo contestar. Ves, no siempre digo lo que quiero.

—Por si luego no te contratan…

—No son los que contratan, sino los contratados quizás.

—Si renaciera Operación Triunfo, ¿aceptarías volver a trabajar en el concurso?

—Síiii.

—A Risto Mejide lo conociste en la universidad y os reencontrasteis diez años después. Un reencuentro agridulce. Después de tantos improperios que os habéis lanzado mutuamente ¿mantenéis algún tipo de relación?

—Ninguna.

—¿Qué opinión te merece Risto?

—Ninguna.

—Él recientemente ha publicado Que la muerte te acompañe. ¿Te han propuesto escribir algún libro?

—Sí, pero en mi caso sería por una cuestión económica porque ahora no tengo ningún interés en escribir un libro.

—Si escribieras tus memorias ¿qué es lo que más nos sorprendería de ti?

—(Ríe) Que tengo un sentido de la libertad muy desarrollado.

—Si tu pareja te pidiera que necesita que le seas fiel ¿serías capaz?

—Nunca me ha pasado. Pero si me lo pidiera sí. Hoy pensaba: Ahora llego a casa y me encuentro a mi pareja follando con otro. ¿Qué haría yo? No me gustaría pero no montaría ningún show. Luego decides si te quieres quedar allí o no.

—¿Es cierto que uno de tus frikismos es que no puedes dormir con los pies dentro de la cama aunque estemos a diez grados bajo cero y sin calcetines?

—Es una mentira mía. Tengo amigos que me dicen en la próxima entrevista responde tal o cual cosa. Es algo que hacen ellos. Es una complicidad entre ellos y nosotros.

—¿Qué es lo más raro que has hecho en tu vida?

—Cuando hice de hombre anuncio colgado, solo, durante ocho horas en una valla publicitaria. 

—Por aquello de la ley de la atracción del libro El Secreto ¿qué te gustaría hacer en estos momentos a nivel laboral?

—¿El Secreto? ¿Ese libro de mierda? Yo lo tengo pero sólo hace que repetir lo mismo. Respecto a la pregunta, me gustaría acabar esta entrevista.

—Me has dejado chafado.

—No. ¡Qué va hombre! Es superbuen final de entrevista.

Àngel LLàcer se ha desnudado por completo en esta conversación. Ahora nos toca a nosotros vestirnos y ponernos guapos para ir al Condal a ver Els bojos del bisturí. Muchas gracias Àngel por tu generosidad y sinceridad.

 

 articulo carlos diaz

carlos diazCARLOS DÍAZ fue finalista como mejor actor en el Premio Espectador de la Revista Teatre Bcn por el personaje de Sra. Lucia en la obra Una Noche de Ópera, de La Cubana y Premio Ondas por el programa Tarde de Todos, en Onda Rambla. Ha trabajado en numerosas obras de teatro: Grupo de teatro La Cubana: Una Noche de Ópera (Dir. Jordi Milán); Las Tres Hermanas, de Anton Chejov (Dir. Jordi Oliver); Pigmalión, de Bernard Shaw (Dir. Nancy Tuñón); Romeo y Julieta, de William Shakespeare (Dir. Nancy Tuñón); cine: Va a ser que nadie es perfecto (Dir. Joaquín Oristrell); Agujeros (Dir. Jan Latussek); Impedimentos (Dir. Doménech Gibert); televisión: Serie El Show de Cándido, en La Sexta; serie Hospital Central, en Tele 5 y serie Lobos, en Antena 3 Televisión, entre otros títulos. Dirigiendo y presentando el programa Contigo en la Tarde fue líder de audiencia en la programación de SomosRadio.

·  Web del autor: http://carlosdiazactor.es/

 Más artículos de Carlos Díaz, en Almiar

 Fotografías de Àngel Llàcer: (inicio) En Wikimedia, By Ivan Paulick [CC BY-SA 3.0] ▪ (cuerpo artículo) En Chica de la Tele [Licencia Creative Commons, Reconocimiento 3.0 España (CC BY 3.0 ES)].

 

artículo Entrevista Ángel Llacer

Más artículos en Margen Cero

 Revista Almiarn.º 60 / septiembre-octubre 2011MARGEN CERO™

 

Siguiente publicación
Y, lo cierto, es que ya quiero otoño. A qué…